Grisino, marca líder en ropa para jugar orientada a bebés, chicos y chicas de 0 a 14 años, se unió a Fundación Gestionar Esperanzas (FGE), dedicada al fortalecimiento de organizaciones sociales que trabajan en comunidades en situación de vulnerabilidad, con el objetivo de colaborar con el Comedor Resistiendo, que forma parte la red de 21 organizaciones comunitarias con las que trabaja la fundación.
En esta oportunidad, Grisino se sumó colaborando con la donación de un importante número de prendas y calzado que fue subastada en la feria que llevó a cabo el Comedor Resistiendo. El comedor y merendero fue creado en 2018 por Gisele Gutiérrez, su familia y un grupo de vecinos, todos comprometidos con un objetivo en común: mejorar la situación de su comunidad. Hoy tienen impacto en más de 60 familias del barrio (un total de más de 200 personas), que pueden comer gracias al trabajo que lleva adelante esta organización.
“Siempre nos emociona contar con la colaboración de marcas que se acercan a la fundación. En este caso, nos alegra comunicar esta alianza que generamos con Grisino destinada a apoyar al Comedor Resistiendo ubicado en el Barrio Las Tunas del Partido de Tigre, uno de los socios de la red de la Fundación Gestionar Esperanzas que colabora para generar propuestas de contención social en barrios en situación de vulnerabilidad, gestionando y articulando voluntades, promoviendo la conformación de redes para multiplicar las oportunidades y transformar la realidad”, comenta Gonzalo Bazgan, Coordinador General de FGE.
“Las Tunas es un barrio con muchas necesidades sociales y económicas. Hoy más de 200 personas que no pueden cubrir sus necesidades básicas asisten a nuestra organización para comer y realizar actividades de capacitación. Nos sustentamos con donaciones y aportes de personas y empresas que nos ayudan a construir un futuro mejor”, comenta Gisele Gutiérrez, referente del Comedor Resistiendo.
“El comedor Resistiendo organizó una feria solidaria para los vecinos del barrio, y nosotros desde Grisino nos sumamos con la donación de prendas. Sabemos que a través de su venta han logrado sustentar parte de los gastos del comedor con la compra de alimentos no perecederos y garrafas, entre otros”, comenta el equipo de Grisino.
