El éxito de un negocio se debe a la satisfacción de los clientes
Si partimos de la base de que los clientes son fundamentales para el éxito del negocio, es importante pensar en muchos factores. Entre ellos están tener una adecuada administración, invertir en publicidad, mantener una buena comunicación interna y sobre todo implementar una buena gestión de clientes. Este último podría considerarse como uno de los factores de suma importancia para marcar el valor diferenciador de tu empresa.
En este contexto, cuando hablamos de gestionar a clientes nos referimos a cuidar la relación comercial, pero sobre todo fidelizarlos ya que, un cliente contento es el mejor marketing que se puede obtener de los servicios ofrecidos. Un cliente contento y fidelizado pondrá a tu empresa como primera opción por la buena gestión que se le haya brindado.
“Para implementar una buena gestión con éxito, sugiero llevar reuniones periódicas y empatizar con la visión que desea el cliente de los servicios que se le vienen gestionando, siempre generando un valor agregado a los servicios que se tengan encargados”, señaló Cindy Quiroz, gerente de operaciones de tgestiona.
En esta oportunidad la especialista nos brinda 5 consejos claves para obtener una buena gestión con el cliente:
- Comunicación: Crear un canal periódico de comunicación y apertura para el feedback y la mejora continua.
- Empatía: Entender la visión de negocios del cliente y sus prioridades.
- Fidelización: Generar un vínculo perenne con el cliente para que siempre seas un referente del servicio que le vienen ofreciendo.
- Seguimiento postventa: Proponer reuniones de feedback donde haya la apertura de recoger oportunidades de mejora.
- Precisión: Hacer los cambios necesarios en el momento oportuno y no cuando el cliente se sienta incómodo con la gestión o servicio ofrecido.
Además, es importante tener en cuenta la gran influencia que tiene la tecnología en la gestión de clientes, ya que da mayor visibilidad a través de la automatización de dashboards o indicadores de gestión y con ello proponer mejoras en los servicios o proyectos de eficiencia, e inclusive nuevos productos.
Finalmente, la empresa debe conocer y empatizar con las necesidades del cliente, sobre ello se puede realizar definiciones de cómo segmentarlo y con ello proponer lo más adecuado para su empresa, esto conlleva a que su experiencia sea personalizada y se marque un valor diferenciado en la gestión.