El plazo para ambos procesos ha sido fijado en ocho meses.
El conductor de televisión Andrés Hurtado es investigado simultáneamente por dos despachos del Ministerio Público en un caso catalogado como “complejo”, que ha tomado un giro trascendental gracias a la declaración de un confesor sincero, según un informe difundido este domingo por Panorama.
Hurtado fue cercado desde hace 11 días por una fiscalía que investiga temas de lavado de activos, mientras que la Segunda Fiscalía Suprema Transitoria Especializada en Delitos Cometidos por Funcionarios Públicos lo centró en otro aspecto del caso que lo implica junto a la fiscal superior Elizabeth Peralta.
El plazo para ambos procesos ha sido fijado en ocho meses, pero solo en la última instancia la investigación ha sido declarada “compleja”, de acuerdo a documentos expuestos por el programa televisivol. El lunes pasado, se ejecutó una diligencia de registro y exhibición de documentos en la oficina de la magistrada. Ambos enfrentan actualmente un impedimento de salida del país por 15 días.
En su declaración expuesta en el reportaje, el confesor (Iván Siucho) relató cómo surgió su relación con Hurtado. Según ese testimonio, su primo Javier Miu Lei le solicitó ayuda para contactarlo con el objetivo de resolver problemas legales y requisitorias. “Hasta ese momento, yo no conocía a ‘Chibolín’ (apelativo de la figura televisiva), así que le pedí a mi hermano Roberto que me lo presentara y organizara una reunión para buscar una solución”, dijo.
Fue en esa reunión, programada para los primeros días de mayo de 2019, donde se conocieron. “Le trasladé la interrogante de mi primo, y él me dijo que me daría una respuesta en unos días”, dijo. La respuesta no tardó en llegar. “Andrés Hurtado se comunicó con nosotros, nos citó a su domicilio y nos indicó que no podía ayudarnos con ese tema, pero que estaría encantado de asistirnos en cualquier otro asunto de lavado de activos debido a que su madre, o ‘mami’, era la Dra. Elizabeth Peralta. Nos dijo que él era el operador de la fiscal”, agregó.
El confesor detalló que su primo se sentía amenazado comercialmente por Paltarumi, una empresa de acopio de minerales. “Así que me pidió una nueva reunión con Andrés Hurtado a mediados de marzo de 2021, para que le abran un proceso de lavado de activos a la empresa Paltarumi, con la intervención de la fiscal Elizabeth Peralta”, señaló.
Aquella cita se realizó en un hotel entre abril y mayo de 2021. “Nos cita a mi primo Javier y a mí, nos hace subir a su cuarto y le muestra a mi primo un legajo de documentos, indicándole ‘misión cumplida, mi madre hizo su trabajo’, y enseña los documentos del proceso de lavado de activos que le habían abierto a Paltarumi. En ese momento, Hurtado pidió, si mal no recuerdo, 80 mil dólares”, detalló.