Desde el 2015, la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) declaró el 11 de febrero como el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, en reconocimiento al papel clave que desempeñan en la comunidad científica y la tecnología. Esta celebración promueve el acceso a la educación, el empoderamiento y la participación equitativa de las mujeres en dichas disciplinas.
“Según el informe _Las mujeres en Ciencias, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas (STEM) en América Latina y El Caribe_ publicado en el 2020, indica que en el 2019 la tasa mundial promedio de investigadoras en el campo de las ciencias era solo del 29,3%. En 2017, del total de investigadores en ingeniería y tecnología de la región, el 36% eran mujeres en Uruguay; el 26%, en Colombia; el 24%, en Costa Rica; el 17%, en El Salvador; en Honduras el 21,5%; y en Bolivia y Perú alrededor del 19%”, sostuvo Patricia Paulet Pérez, subdirectora académica de la facultad de Ingeniería y Tecnología de IDAT.
El estudio realizado por la Organización de las Naciones Unidas para la Igualdad de Género y el Empoderamiento de las Mujeres (ONU Mujeres) destaca que en algunas ocupaciones, como ingeniería e informática el porcentaje de participación de las mujeres investigadoras es aún más bajo, al igual que la brecha salarial. Asimismo, menciona que los reconocimientos en estas disciplinas son bastante limitados. Por ejemplo, hasta el 2020, solo el 3% de los Premios Nobel en ciencias habían sido otorgados a mujeres.
Nuevos retos
Según un informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) del 2019, solo el 35% de los estudiantes matriculados en carreras STEM son mujeres. El primedio decrece al 3% en carreras relacionadas con tecnologías de la información y la comunicación (TIC), al 5% en las carreras de matemáticas y estadística y al 8% en ingenierías.
La subdirectora de la facultad de Ingeniería y Tecnología de IDAT, Patricia Paulet, destacó que si bien existe un crecimiento paulatino por el interés de adolescentes y mujeres en carreras técnicas relacionadas a estas disciplinas STEM, aún existe un camino muy grande por recorrer en cuestión de paridad. “En el 2022, un 14.1% de nuestra población estudiantil eran mujeres. La carrera con mayor participación femenina fue Desarrollo de Sistemas de Información, en donde de cada 10 estudiantes 2 fueron mujeres, por esto buscamos impulsar la igualdad de oportunidades para las mujeres, de modo que puedan desarrollarse en nuestras carreras STEAM, ayudando así a reducir la brecha de género, fomentando la diversidad que es la base para crear soluciones, productos y servicios para todos.”, puntualizó Paulet.
La especialista destacó que la oferta educativa STEAM es bastante amplia como las carreras de Seguridad de la Información, Administración de Redes y Comunicaciones, Mecatrónica Industrial, Electricidad y Electrónica Industrial, entre otras. Asimismo, resaltó el interés de las empresas por contratar mujeres en sus centros laborales con salarios competitivos.
Dato
La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible adoptada por la Asamblea General de la ONU reconoce que se requieren cambios urgentes para que la educación alcance su máximo potencial. Entre los principales retos se encuentran la implementación de políticas para eliminar las desigualdades en el acceso a la educación y fomentar la participación de mujeres en la comunidad científica y tecnología.