Conoce qué examen necesitas según tu destino, cuánto cuesta, cuándo debes prepararte y cómo resolver el mayor reto después del idioma: financiar tu experiencia internacional.
Estudiar en el extranjero es una experiencia transformadora que no solo abre puertas académicas, sino también profesionales y personales. Sin embargo, para acceder a universidades internacionales en países como Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Alemania o Francia, es indispensable demostrar el dominio del idioma mediante una certificación oficial.
A continuación, te explicamos todo lo que necesitas saber sobre los exámenes de idiomas, sus costos, validez, preparación y qué papel juega Laudex (https://laudex.mx/), una institución financiera mexicana que ha sido clave para que miles de estudiantes logren estudiar en el extranjero.
¿Qué certificación necesitas?
Depende del idioma y del país al que viajes. Aquí los más comunes:
Inglés
- TOEFL:
- Formato iBT y PBT.
- Costo aprox. $4,500 MXN.
- Validez: 2 años.
- IELTS:
- Academic o General.
- Costo aprox. $4,500 MXN.
- Validez: 2 años.
- Cambridge English:
- Exámenes desde A2 hasta C2.
- Precio entre $3,000 y $4,500 MXN.
- Validez indefinida.
Francés
- DELF/DALF:
- Validez indefinida.
- Costo entre $2,000 y $3,500 MXN.
- TCF:
- Validez de 2 años.
- Costo aprox. $3,000 MXN.
Alemán
- Goethe-Zertifikat:
- A1–C2.
- Validez indefinida.
- Costo entre $1,500 y $3,500 MXN.
- TestDaF:
- Nivel B2–C1.
- Validez indefinida.
- Costo aprox. $3,000 MXN.
Otros idiomas
- Italiano: CILS, CELI.
- Chino: HSK, BCT.
Contar con alguna de estas certificaciones no solo valida tu nivel lingüístico, también aumenta tus posibilidades de ser admitido, facilita el acceso a becas y mejora tu experiencia al integrarte a la vida académica y social en otro país.
¿Dónde y cuándo puedes presentar los exámenes?
La mayoría de los exámenes se aplican únicamente en centros autorizados, distribuidos en todo el país. Algunos ejemplos son:
- UNAM, IPN, International House, British Council, Alianza Francesa, Goethe-Institut, Instituto Italiano de Cultura, entre otros.
Existen versiones en línea de algunos exámenes como el TOEFL, el IELTS o el TCF, pero es importante verificar si la universidad o embajada acepta este formato, ya que en muchos trámites solo se permite la versión presencial.
Respecto a la planeación, lo ideal es agendar tu cita con al menos 1 a 3 meses de anticipación. Certificaciones como Cambridge, CILS o CELI suelen tener menor frecuencia, por lo que es recomendable reservar con mayor tiempo.
En caso de no alcanzar el puntaje requerido, la mayoría de los exámenes puede repetirse sin límite de intentos, aunque deberás pagar la tarifa nuevamente y esperar la siguiente convocatoria (que suele ser mensual o trimestral).
Más allá del idioma: la barrera financiera
Obtener una certificación de idioma no solo es un requisito académico: es una llave que abre las puertas a universidades de clase mundial, programas de becas, experiencias laborales y redes internacionales. Estudiar en el extranjero representa la posibilidad de acceder a un entorno multicultural, aprender desde otra perspectiva y desarrollar habilidades clave como la adaptabilidad, la autonomía y la visión global. Es, sin duda, una inversión con retorno a largo plazo.
Sin embargo, una vez superado el reto del idioma, surge una de las principales barreras para muchos aspirantes: el financiamiento. A los costos de inscripción y preparación de los exámenes se suman gastos como la colegiatura, el alojamiento, el transporte, el seguro médico y otros trámites. Aunque la educación internacional ha dejado de ser exclusiva para unos pocos, sigue siendo necesario contar con herramientas que faciliten su acceso.
En este camino, existen instituciones financieras como Laudex, que ofrecen esquemas especializados para quienes desean estudiar fuera de México, incluyendo el financiamiento de cursos de idiomas y certificaciones. Este tipo de apoyos, enfocados en la movilidad académica, permiten que el factor económico no sea un freno para dar el siguiente paso.
Estudiar en otro país no comienza con una maleta, sino con decisiones informadas y pasos estratégicos. Prepararse con anticipación, elegir la certificación adecuada y considerar opciones de financiamiento confiables puede marcar la diferencia entre postergar un sueño y hacerlo realidad.