- Agricultores emplearán residuos de la producción del cacao para mejorar su producción y diversificar sus ingresos.
- A través de acuerdos, agricultores conservarán también 100 hectáreas de bosque ucayalino.
Con el objetivo de conservar los bosques y restaurar la capacidad productiva de los suelos degradados para el cultivo del cacao, 200 agricultores de la provincia del Padre Abad aprovecharán los desechos agrícolas a través de la producción de fertilizante orgánico para recuperar 200 hectáreas y lograr así una producción de cacao sostenible.
Esto gracias al Proyecto “Valorización de los coproductos y desechos agrícolas en la cadena de valor de cacao de excelencia en el Perú”, llevado a cabo por CEDRO y Colpa de Loros, con el respaldo y financiamiento de la Alianza Empresarial por la Amazonía, una plataforma impulsada por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo (USAID), el Gobierno de Canadá y Conservación Internacional, que tiene como objetivo promover el desarrollo de negocios sostenibles en la Amazonía peruana.
Esta iniciativa busca impulsar una economía circular en los distritos de Callería, Campo Verde, Neshuya y Curimaná, Padre Abad y Puerto Inca, al utilizar y darle valor los subproductos del proceso del cacao en 200 socios agricultores de la Cooperativa Agraria de Cacao Aromático Colpa de Loros. De esta manera se fomentará la conservación de ecosistemas, además de aprovechar los residuos agrícolas disponibles para diversificar los ingresos de los productores de cacao.
Uno de los grandes problemas que enfrenta la región Ucayali es la deforestación. Solo en la provincia de Padre Abad, del 2017 al 2020, se deforestó, aproximadamente, 39 mil hectáreas de bosque. De esta forma, el proyecto busca recuperar las parcelas de los socios productores y la conservación de 100 hectáreas de bosque a través de acuerdos directos.
Durante la presentación del proyecto participaron el gerente general de la Cooperativa Colpa de Loros, Ernesto Parra y Guerra; el gerente de Operaciones de Conservación Internacional, Daniel Vives; el director y la supervisora técnica del proyecto de CEDRO, Alberto Hart y Fabiola Céspedes, respectivamente, entre otros representantes de diversas instituciones.