La ausencia de las autoridades en los colegios vulnerables muestra su indiferencia frente a la desigualdad
En el Perú la educación enfrenta miles de desafíos, especialmente si hay desigualdad en sus regiones, que presentan en sus colegios una infraestructura muy escasa, del que muchas veces falta acceso a servicios básicos, las deficiencias en la cobertura, calidad de la enseñanza, y las dificultades para acceder a servicios de salud esenciales.
Respecto al factor que más contribuye al deterioro en la educación es la infraestructura de los colegios. Frente a este problema el dinero que se les da a las escuelas públicas no bastaría, así también lo sostuvo el exministro de Educación Idel Vexler, que entre el año 2024 y 2025 la infraestructura de los colegios “es cada vez más precaria” y que el gobierno solamente ha destinado, en promedio, S/5 mil por local escolar para realizare reparaciones.
Para poner en ejemplo lo dicho en el anterior párrafo, podemos mencionar el caso de Loreto y Piura. En la región amazónica de Loreto los escolares del colegio estatal Juan José Bardales Chuquipiondo reciben clases en un bar, al no contar con una infraestructura funcional. También, en la sierra de Piura más de cien escolares del Colegio 14254 han sido reubicados en una capilla, la única construcción disponible tras el colapso parcial de su plantel.
Asimismo, en un informe echo en febrero del 2025, por parte de La Contraloría General de la República, se reveló la existencia de instrumentos de gestión educativa sin aprobación ni vigencia en el 60% de los colegios. Incluso, en el 65 % de las II.EE. no se cuenta con un Plan de Gestión del Riesgo de Desastres vigente y el 55 % no ha conformado la Comisión de Gestión del Riesgo de Desastres y brigadas de respuesta.
Paralelamente, en su operativo de educación se identificó la falta de profesionales en psicología, en las diversas instituciones educativas: el 97% de los colegios carece de un especialista encargado de la prevención y tratamiento de la violencia y el acoso escolar, lo que limita la adopción de medidas correctivas. Encima en los colegios el 62 % necesita mantenimiento o sustitución de los servicios higiénicos, y el 60 % reporta techos en mal estado. A ello se suma que el 40 % carece de extintores vigentes, 25 % no tiene señalización de los puntos de reunión en zonas seguras, y el 17 % no cuenta con barandas o elementos de seguridad en zonas con desniveles.
De igual manera los colegios privados presentan precariedad en la educación, en donde mies de niños estudian en colegios que eran casas. Estas escuelas de bajo costo se encuentran según estudios del Ministerio de Educación (Minedu) y otras instituciones como Grade, tienen prácticas pedagógicas poco adecuadas para los aprendizajes, docentes con condiciones laborales precarias y varios de ellos sin título profesional o pedagógico.
