En todo el mundo, los afrodescendientes están alzando la voz y emprendiendo acciones colectivas para acabar con el racismo y las injusticias que perpetua.
El 24 de enero del 2020 se celebró, por primera vez, el Día Mundial de la Cultura Africana y de los Afrodescendientes, una jornada que busca promover el respeto a la diversidad cultural y fomentar la creatividad humana a nivel global. Con esta conmemoración se busca resaltar el papel de esta población, reconociendo su papel crucial en el desarrollo sostenible.
El término “afrodescendiente” fue reconocido por los Estados y las Naciones Unidas como un concepto de carácter jurídico y político acogido durante la Conferencia Regional de las Américas, realizada en Santiago de Chile en el año 1999 como preparación para la Tercera Conferencia Mundial contra el Racismo, la Discriminación Racial, la Xenofobia y las Formas Conexas de Intolerancia, celebrada en Durban (Sudáfrica) en el año 2001, según señala un artículo de la Organización panamericana de la salud OPS.
Bajo esa línea, este término aún no es dimensionado como debería, explica Mariela Noles Cotito, investigadora del Centro de Investigación de la Universidad del Pacífico (CIUP), quien añade que algunos de los principales desafíos para la afro peruanidad son muy parecidos a los que existían hace 30 años o 50 años y pocos se han ido flexibilizando.
“Hoy en día hay poca representatividad del sujeto afro en espacios de toma de decisión o en espacios normativos”, manifiesta Noles Cotito, quien enfatiza que falta visibilizar, enseñar e incluir en muchos lugares de nuestro país información sobre los pueblos y aportes de los afrodescendientes.
Actualmente, alrededor de 200 millones de personas se identifican a sí mismas como descendientes de africanos en el continente americano y han demostrado que sufren las peores condiciones de pobreza, carencia en el acceso a servicios básicos y desigualdad, reveló un informe de la Comisión Económica de las Naciones Unidas para América Latina y el Caribe (CEPAL).
La investigadora del CIUP explora diferentes aspectos de la afroperuanidad, lo afrodescendiente, y su impacto en la sociedad peruana en el libro Ciudadanías invisibles: miradas en torno a la afroperuanidad y la negritud, obra publicada por el Fondo Editorial, que editó junto a Elizabeth Hordge-Freeman y que fue presentado en la última Feria Internacional del Libro de Lima 2024.
“Somos la excepción, entre comillas, en muchos espacios, por lo que aún falta la normalización de nuestra presencia. Ciudadanías invisibles muestra cómo hemos construido nuestra ciudadanía en este contexto, además de dar herramientas para descubrir información valiosa sobre los afrodescendientes que van más allá de los pequeños hitos históricos que son conocidos”, remarcó la investigadora.
