Por: José Darío Dueñas Sánchez (*)
Cuzco es famosa por ser parada obligada para conocer la ciudad sagrada de los Incas “Macchu Picchu”, pero no solo ello es importante. La ciudad alberga varias Iglesias, es por ello que la Semana Santa en Cusco es una festividad religiosa y cultural de gran importancia que conmemora la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo. Durante esta celebración, se realizan diversas actividades como procesiones, bendiciones de hojas de palma y cruces tejidas, y la participación en misas y eventos religiosos en la Basílica de la Catedral.
Uno de los momentos destacados es la procesión del Señor de los Temblores, considerado el Patrón Jurado de la ciudad, que atrae a miles de fieles y visitantes. Esta festividad, que se celebra entre la segunda quincena de marzo y la primera semana de abril, es una oportunidad para experimentar la profunda devoción, tradición y cultura cusqueña. Las calles se llenan de energía, devoción y fe, y se ofrecen comidas típicas durante todo el día como parte de las tradiciones arraigadas de la Semana Santa en la región.
La Plaza San Francisco se convierte en el escenario principal. Aquí comienza el Viacrucis, que culmina en la Cruz del Papa ubicada en Saqsaywaman. Este evento es organizado por el Convento de San Francisco.
Paralelamente, en la misma plaza, se lleva a cabo el Hampi Rantikuy, una feria de plantas medicinales vendidas por campesinos de lugares lejanos. Destaca la compra de cruces de espinos, que se colocan detrás de las puertas de los hogares cusqueños como protección contra el mal.
La imagen del Señor de los Temblores, también conocido como Taitacha Temblores, es el centro de la devoción. Su historia se remonta a cuando el emperador Carlos V envió la efigie a Cusco, modelando sus rasgos según los indígenas locales. Desde entonces, las andas de este Cristo mestizo salen en procesión cada Lunes Santo, seguidas por una multitud de fieles.
Las casas adornan sus ventanas con refinadas piezas de tapicería aterciopelada y brillantes alfombras para recibir al Señor de los Temblores.
El Cusco, con su rica historia y herencia cultural, alberga una impresionante cantidad de iglesias y templos. A continuación, te presento algunas de las más destacadas:
Catedral del Cuzco:
La Catedral del Cuzco, también conocida como la Basílica Catedral del Cuzco, es uno de los monumentos religiosos más importantes de la ciudad. Su construcción comenzó en 1560 y se extendió durante 100 años. El interior de la catedral se caracteriza por su sobriedad y proporciones, influenciadas tanto por el clasicismo español como por la arquitectura incaica. La puerta principal, de estilo barroco cusqueño, es una verdadera joya.
Iglesia de Belén:
Ubicada en la Plazoleta Belén, en el distrito de Santiago, la Iglesia de Belén es un tesoro arquitectónico. Su estilo mezcla varias tendencias, destacando el barroco y el mestizo plateresco. El altar mayor está cubierto de hojas de plata pura.
Iglesia de la Compañía de Jesús:
Esta iglesia, construida por los jesuitas, es un ejemplo impresionante del barroco andino. Su fachada es exquisitamente tallada y ornamentada. En su interior, encontrarás una profusión de detalles artísticos y una impresionante colección de pinturas y esculturas religiosas.
Iglesia de San Blas:
La Iglesia de San Blas, ubicada en el barrio homónimo, es famosa por su hermoso altar tallado en madera de cedro. Además, es conocida por su escalera de piedra tallada, que lleva al atrio.
Iglesia de Santo Domingo (Qorikancha):
La Iglesia de Santo Domingo, construida sobre los restos del antiguo templo inca de Qorikancha, combina elementos incaicos con la arquitectura colonial. Su interior alberga una impresionante colección de arte sacro.
Iglesia de San Cristóbal:
Desde la Iglesia de San Cristóbal, ubicada en la colina del mismo nombre, se obtienen vistas panorámicas espectaculares de la ciudad. Es un lugar especial para apreciar la belleza de Cusco desde las alturas.
Iglesia de San Pedro:
La Iglesia de San Pedro, situada cerca de la Plaza de Armas, es una de las más antiguas de la ciudad. Su fachada es sencilla pero su interior alberga tesoros artísticos.
Iglesia de La Merced:
La Iglesia de La Merced, fundada en 1536, es un ejemplo temprano de la arquitectura colonial en Cusco. Su fachada es de estilo renacentista y su interior alberga una impresionante imagen de la Virgen de la Merced.
Estas son solo algunas de las muchas iglesias y templos que hacen de Cusco un destino espiritualmente enriquecedor. Cada uno de estos lugares tiene su propia historia y belleza, y explorarlos es una experiencia única. Definitivamente NO te arrepentirás de visitar la ciudad del Cusco, vivirás experiencias únicas, sumergiéndote en la espiritualidad de la festividad de la semana santa.