Moquegua implementará un sistema de inteligencia artificial en sus redes de agua potable para detectar de forma temprana fugas, alteraciones en la presión, fallas en los medidores y el deterioro de la red de abastecimiento, evitando pérdidas de agua y posibilitando la atención oportuna de desperfectos.
Esta tecnología, desarrollada por Pavco Wavin, fue presentada en el Expo Agua 2023 como uno de los avances más importantes de la industria en la gestión de agua potable. Será implementada por la Empresa Prestadora de Servicios (EPS) Moquegua con el objetivo de reducir los niveles de agua no facturada, que se pierde en las redes por pequeñas fugas ocasionadas por el deterioro de las tuberías.
“Existen fugas que pueden tardar varios meses en salir a la superficie. Esta tecnología detecta estas desviaciones gracias al análisis avanzado de datos. Proporcionar a las ciudades soluciones que garanticen un suministro de agua seguro es esencial para Pavco Wavin, porque una gestión eficiente permitirá la ampliación del servicio para más familias”, afirmó el Ing. Carlos Villegas.
Para la implementación de esta tecnología, se dispondrá de una Central de Gestión de Eventos que permitirá el análisis avanzado de datos recogidos por los sensores de presión y caudalímetros instalados en la red de agua potable de la ciudad. Además, alimentarán con información crítica a los gemelos digitales de la Empresa Prestadora de Servicios (EPS) Moquegua, para recrear escenarios y tomar decisiones oportunas en la gestión del abastecimiento de agua potable a los usuarios.
“La EPS Moquegua tiene la ventaja de contar con una sectorización e instrumentación de su red con sensores, lo que hace viable este proyecto. La tecnología Smart Water Solutions junto a la aplicación de la inteligencia artificial generará un ahorro importante de este líquido vital”, manifestó.
El especialista reveló que, en Latinoamérica, los niveles de agua no facturada, que se pierde en las redes por pequeñas fugas o fallas en las tuberías, llega al 30%. Sin embargo, Moquegua es una de las ciudades más eficientes del país con un promedio de agua no facturada de 22%. Con la aplicación de la nueva tecnología, obtendrá sistemas aún más eficientes.