A través de un documento emitido por la División de Seguridad de Penales de la Policía Nacional, dirigentes radicales de Puno habrían acordado movilizarse hacia la capital a partir del sábado 25 de febrero para llevar a cabo una protesta, que denominan “La segunda Toma de Lima” que se llevaría a cabo el 1 de marzo del presente año.
De acuerdo con la Policía Nacional del Peru (PNP), colectivos de la izquierda radical organizarían y coordinarían actos vandálicos en la capital (Lima), teniendo como propósitos de destrucción instalaciones y carreteras estratégicas.
“Muy probablemente se reúna con integrantes de diferentes grupos gremiales y colectivos de izquierda radical a fin de coordinar actos vandálicos en la ciudad capital, para atentar y/o destruir instalaciones estratégicas, activos críticos nacionales”, se puede leer en el informe policial.
En esa misma línea, señalan que la Carretera Panamericana Sur, Ministerio Publico, el Poder Judicial, embajadas e incluso domicilios de los padres de la patria podrían ser blancos de nuevos ataques provocados por estos manifestantes radicales.
Por tal motivo, el documento presentado por la PNP dispuso lo siguiente: “Los jefes de los departamentos de la DIVSEPEN PNP (División de Seguridad de Penales), teniendo presenta la información precedente adoptarán las acciones y las medidas correspondientes en el ámbito de su competencia, a efectos de hacer de conocimiento a la totalidad del personal bajo su mando para que extremen las medidas de seguridad durante el desplazamiento en zonas de conflicto”.
“Asimismo, todas las unidades PNP deben mantenerse en alerta y extremar sus respectivas medidas de seguridad con el fin de evitar desmanes ante la propiedad públicas y privada”, Concluye el documento con la firma del coronel de la PNP Juan Carlos Ramos Galindo.
